El fotógrafo se confiesa “emocionado” por la iniciativa que avalan 13 colectivos sociales , y siente que esta propuesta “ya es en sí misma un premio” de la sociedad palmera, un reconocimiento que quiere compartir con todas las personas “de buen corazón solidarias” con los damnificados por esta catástrofe
El fotógrafo Alfonso Escalero quiere aprovechar su regreso estos días a La Palma, donde hará fotos de la zona afectada por el volcán en Cumbre Vieja, para expresar su más profundo y emocionado agradecimiento a las 13 asociaciones y plataformas de La Palma que han propuesto al Cabildo palmero su nombramiento como Hijo Adoptivo de la isla.
«La propuesta ciudadana ya es el mejor premio que puedo recibir»
Escalero, de origen malagueño pero desde los 18 años afincado en Tenerife, afirma que le ha conmovido que esta iniciativa la avale la práctica totalidad de los colectivos de afectados del volcán constituidos tras la erupción de 2021, por su labor altruista en favor de la población damnificada.
Confiesa que «la propia propuesta” de que sea nombrado Hijo Adoptivo, “viniendo de quien viene, de la propia sociedad afectada, ya es el mayor reconocimiento que una persona como yo podía recibir» . «Llevo La Palma en el alma”, manifiesta, “y a día de hoy no he podido dejar de pensar ni un solo momento en echar una mano para que las familias que vieron sus proyectos de vida truncados puedan seguir adelante».
«Unidad para una reconstrucción más rápida y justa»
El fotógrafo les anima a formar un frente común para que la reconstrucción sea más rápida y justa, y a seguir haciendo oír su voz, porque «el éxito de los palmeros por salir adelante será vivido con igual satisfacción por las miles de personas que les han mostrado su solidaridad».
Enfatiza que «de por vida» estará sentimentalmente vinculado a La Palma. «En catástrofes como esta es cuando todos los seres humanos debemos dar lo mejor de nosotros mismos, y ese espíritu y esa ética nos hace mejores personas», concluye.
“A lo largo de la vida de cualquier persona, llegará algún momento en que debe decidir si ayudar o mirar para otro lado, y espero que se sepa elegir la única manera de luchar por un mundo mejor y más justo”, reflexiona.
Mensajes de apoyo
Asimismo, agradece la “infinidad de mensajes de cariño y apoyo recibidos, no solo de los habitantes de la isla, sino de tantas y tantas personas” que han seguido a través de su trabajo la evolución de lo que ocurrió y sigue ocurriendo en La Palma, por lo que reconoce que recibir el cariño y el sentimiento de la población afectada le anima a continuar documentando el proceso de reconstrucción y recuperación del valle de Aridane.
La solicitud de este reconocimiento oficial para Alfonso Escalero se presentó en diciembre pasado ante el Cabildo palmero a través de un escrito firmado por la Asociación Tierra Bonita, la Asociación Social Volcán Cumbre Vieja, la Plataforma de Afectados por la Erupción del Volcán de Cumbre Vieja 2021, la Iniciativa Ciudadana de Apoyo a los Afectados del Volcán, la Plataforma Jaraco de Afectados de Puerto Naos y La Bombilla, la Asociación de Vecinos de La Laguna, el Colegio Público de Todoque, la Asociación Hagamos Pueblo, la Asociación Protectora de Animales y Plantas Benawara, la Unidad de Protección Animal (UPA-La Palma), la Asociación de Animales Abandonados (Aanipal), la Asociación Agua para La Palma y la Plataforma por un Precio Justo y Auténtico del Plátano.
La solidaridad en forma de fotos aéreas
«Vine a La Palma con mi equipo a rodar un documental de un fenómeno natural cuando estalló el volcán», evoca este profesional, «pero desde el primer momento vi que se trataba de una catástrofe con mucho sufrimiento humano, así que cambié nuestro plan y nos pusimos al servicio de la población damnificada, en aquello en lo que mejor podíamos ayudar: las imágenes aéreas sobre la situación de las propiedades de los evacuados».
Hay que recordar que I Love The World ha realizado miles de fotos en 360 grados y térmicas durante y después de la erupción, que ha cedido de manera gratuita a las personas damnificadas, con lo que cubrió un vacío al no existir un servicio público de drones que de manera personalizada, actualizada y periódica le diera información.
El libro benéfico con los testimonios de los afectados
Además, tras conocer las amargas vivencias de cientos de familias sobre el caos y el sufrimiento que provocó la erupción, tomó la iniciativa de reunir en un libro benéfico los testimonios de quienes quisieron darlo públicamente, titulado ‘Las otras historias del volcán’. «Una publicación», subraya, «para que lo verdaderamente ocurrido en La Palma no se olvide ni haya sido en balde, de manera que aprendamos para el futuro en este tipo de emergencias en Canarias”.
Los beneficios de la venta del libro se han dedicado enteramente a acciones solidarias para ayudar a los afectados, a través de la asociación Tierra Bonita, entre las que cabe destacar el reparto de bonos de alimentos, ropa y combustible (en colaboración con la asociación Hagamos Pueblo); la puesta en marcha de un servicio de comunicación que ha incluye una diario solidario para dar voz a las personas damnificadas y seguir la actualidad de la reconstrucción, y un gabinete de prensa que ha elaborado y difundido comunicados a petición de asociaciones y plataformas; así como asesoramiento jurídico.
Contra el olvido
Además, desde cuando la erupción estaba en curso hasta la actualidad, Escalero no ha cejado en su empeño de que el foco de la actualidad no deje de estar puesto en La Palma, ya que lo duro empezó cuando se apagó el volcán, por lo que ha facilitado que de manera desinteresada sus imágenes de lo ocurrido se hayan publicado en medios de comunicación dentro y fuera de la Isla Bonita.
En el segundo aniversario de la erupción, durante la presentación del libro El volcán publicado por el Consejo General de Notarios, el presidente del Cabildo palmero, refiriéndose a los voluntarios, manifestó: «No todo lo que pasó aquí con el volcán fue malo; nosotros hemos podido ver un movimiento que no se había visto antes, una demostración de preocupación por lo que les pasaba a las personas que estaban sufriendo desde muchos ámbitos. Aquí tenemos a personas que no acostumbramos a tenerlas aquí; si me permiten voy a saludar a Alfonso Escalero, que, además de su trabajo, estuvo como nadie para los afectados; fue durante muchos día, los ojos de los afectados y transmitió la veracidad de lo que estaba pasando día a día… Si hay alguna palabra que defina lo que ha pasado aquí es precisamente incertidumbre, y ese trabajo de Alfonso y su equipo vino a operar en lo contrario, y después todo lo que ha hecho con ese libro que también ha ayudado a seguir poniendo de relieve el problema que tenemos en la isla de La Palma y en el Valle de Aridane»:
