El gasto público de la instalación, funcionamiento y explotación de las dos plantas desaladoras que se montaron en Puerto Naos para el riego agrícola durante la erupción ha acabado superando los 18 millones de euros, pese a que el presupuesto inicial tramitado por procedimiento de urgencia era de 4,3 millones de euros, según ha informado el Gobierno canario.
El Consejo de Gobierno autorizó este lunes 11 de diciembre la segunda y última de las dos modificaciones presupuestarias tramitadas por la Consejería de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas, para abonar la totalidad de la deuda pendiente por los costos de las dos desalinizadoras portátiles instaladas en La Palma tras la erupción volcánica.
El importe de esta modificación asciende a 3.000.000 euros, que junto a la modificación aprobada el pasado 27 de noviembre por importe de 1.459.870 euros, permite saldar por completo la deuda contraída con la empresa adjudicataria de los trabajos de instalación y explotación de las desaladoras, y hacerlo antes de finalizar el año tal y como se comprometió el consejero Manuel Miranda.
Como se recordará, la erupción volcánica provocó una emergencia hídrica en el Valle de Aridane, al verse seriamente dañadas las instalaciones de suministro de agua para el riego agrícola.
En el mes octubre de 2021, el Gobierno de Canarias puso en marcha dos desalinizadoras portátiles trasladas a la Isla, que estuvieron funcionando hasta el 31 de mayo del presente año, una vez fueron reemplazadas las canalizaciones y dotaciones dañadas por el volcán.